En el día de ayer se inició un motín en la Unidad Penitenciaria 5 de Rosario que incluyó sábanas incendiadas, como parte de un reclamo que se remonta a principios de diciembre. El motivo es que unas 70 mujeres detenidas y 4 niños alojados con sus madres, se encuentran con patologías gastrointestinales, y mientras las autoridades apuntan a un virus que se acentuó por las altas temperaturas, las internas denuncian que se trata de contaminación en el agua y en los alimentos.
Durante este miércoles las internas de la cárcel de mujeres profundizaron un reclamo que sostienen desde hace meses por mejoras en las condiciones de alojamiento. Advirtieron que hay sectores de la unidad penitenciaria tienen poco acceso a agua potable. También hay sospechas de contaminación luego de que personal de mantenimiento rompió un caño que no fue arreglado y provocó que el agua se mezclara con los efluentes cloacales.
En ese marco es que desde el lunes las internas comenzaron a presentar síntomas gastrointestinales como vómitos y diarrea, también fiebre, hasta llegar a unas 70 mujeres afectadas. También hay 4 niños con síntomas en el pabellón de madres, donde hay 13 mujeres y 11 criaturas que tienen desde meses de vida a 4 años.
Estas protestas son la continuación de otras realizadas en distintos momentos desde hace varios meses. La más reciente había sido a principios de diciembre pasado cuando las internas del pabellón de madres difundieron una serie de reclamos y exigencias relacionadas a las condiciones de alojamiento.