La Agencia Provincial de Seguridad Vial (APSV) lleva a cabo controles de velocidad en conductores, con la utilización de dispositivos fijos y móviles con el objetivo de evitar y reducir siniestros viales por esta causa.
En los primeros seis meses del año se labraron 233.984 actas por exceso de velocidad, lo que implica un crecimiento del 53 % respecto al mismo período en 2023. En 2024, el mayor registro detectado es el de un conductor que circulaba a 203,66 km/h, donde la máxima permitida era de 60. El 80 % de los vehículos que incurren en esta infracción son vehículos livianos (automóviles, pickups, etc.).
El mapa de radares en la provincia de Santa Fe se completa con 74 equipos en 30 localidades habilitados por la APSV e instalados en rutas con jurisdicción de municipios y comunas. El objetivo de esta política de prevención y control es reducir el número de siniestros y de víctimas, teniendo en cuenta las particularidades de cada región, los tramos de ruta con mayor circulación vehicular, los que registran mayores excesos de velocidad y que requieren una intervención parte del Estado.
En la actualidad la Provincia cuenta con 12 radares fijos instalados en rutas y autopistas y 4 móviles. El plan de trabajo entre la APSV y la unidad transitoria, que nuclea a las empresas prestadoras del servicio de radarización, prevé instalar 6 nuevos equipos fijos y 11 móviles en 2025. Esto representará un total de 33 equipos instalados al finalizar el próximo año.