A pocas horas de haberse conocido el sangriento crimen de un policía de Seguridad Vial, hallado muerto dentro de su auto incendiado, un mecánico identificado como Ariel Aguirre fue arrestado en su domicilio de Margarita (Depto. Vera), señalado como la última persona que estuvo con la víctima. El sujeto se autoincriminó cuando estaba siendo entrevistado por la policía, aunque la confesión no es válida” hasta tanto no la ratifique en sede fiscal.
Voceros judiciales detallaron: “Primero dio una versión contradictoria, o una versión que luego no se pudo constatar. Mencionó a una testigo, que al ser convocada esa mujer contradijo la versión dada. Incluso la chica dijo que él la llamó para que lo busque en una dirección cercana al lugar del hecho a la hora del mediodía”.
Todo indica que se trató de un crimen por problemas personales, y la función que el difunto prestaba como policía no sería el móvil. Además, se supo que la mujer en cuestión es una estudiante del Instituto de Seguridad Pública, quien ya fue citada a declarar.
Que el acusado fuera la última persona que estuvo con el policía, se desprende de la declaración de familiares de la víctima, quienes afirmaron que lo fue a ver para llevarle un caño de escape roto.
Mientras todavía se trabaja en la zona del suceso para dar con el arma homicida, en el domicilio se secuestraron prendas de vestir para su análisis, y se le practicó al sospechoso la prueba de luminol para detectar rastros de sangre, lo que dio resultado negativo.
Mientras se esperan datos de la autopsia en la morgue de Reconquista, el policía ultimado presentaba al menos 6 puñaladas en el tórax cuando fue hallado sin vida en el asiento posterior de su Chevrolet Prisma en la zona rural de Margarita. Su victimario intentó prender fuego el vehículo para borrar todo indicio de su accionar criminal, acto que logró parcialmente.